En la barriada Aroca de la pedanía murciana, hacen guardia las 24 horas del día para que los técnicos no terminen de montarla
26.02.11 - 02:02 -
DAVID CANO GEA | MURCIA.
Todo comienza en 2007, cuando los vecinos del barrio Aroca, de Puente Tocinos, se enteran de que en uno de los edificios de la barriada va a instalar una antena la empresa Telefónica. En ese momento, los vecinos se reúnen y se empiezan a movilizar por algo que entienden que es «perjudicial para la salud y una injusticia», explica el portavoz de estos vecinos, Simón García. «Cuando nos dimos cuenta de que estaban empezando a instalar la antena nos pusimos a hacer guardia, para que no vinieran. Además, nos pusimos en contacto con el alcalde pedáneo, Enrique Cano, que nos ayudó junto a la policía a parar la obra».
Tras esto, y según aseguran los vecinos de esta pedanía murciana, las aguas se calmaron durante un año y medio en el que no han tenido constancia de ningún movimiento de operarios de la empresa que iba a instalar la antena. Hasta hace cuatro meses. «Hace poco volvimos a ver a otros operarios que venían a instalar más partes de la antena. Nos volvimos a poner en contacto con la policía y los bajaron de la azotea, ya que estaban intentando instalarla sin licencia», asegura este vecino que cuenta que el teniente de alcalde de Murcia le mandó un escrito, «en el que se especificaba que le denegaban la licencia, y no sólo eso, sino que en el plazo de un mes tenían que retirar toda la instalación que habían puesto».
Sin embargo, ese plazo de un mes y medio ya expiró y no han retirado ninguna parte de la antena, que aún sigue sin funcionar, pero con tres cuartas partes de la instalación finalizada. «No sólo han hecho caso omiso a ese escrito, sino que han seguido viniendo para instalar más cosas. Queremos saber quién manda en esto, porque nos da la sensación de que se están riendo de nosotros y no queremos que esto sea un cachondeo», advierte Simón. Estos vecinos cuentan que la última vez que vieron a unos operarios entrar en el edificio iban a poner el contador de la electricidad. «Nos hemos puesto a hacer guardias. Tenemos unos turnos cada dos horas, en las que dos personas van haciendo relevos; por la noche, otra persona se encarga de vigilar. Llevamos cinco meses y medio haciendo guardia», dice el portavoz.
Estos vecinos están a expensas de que la empresa recurra la denuncia que ellos han puesto en Urbanismo. Mientras, asegura Simón, «vamos a seguir con las reivindicaciones porque ellos no tienen licencia». Todo este caso trae de cabeza a los vecinos del barrio de Aroca que no se fían de los efectos en la salud que pueda acarrear la antena cuando funcione. «Ayer vino un trabajador de la empresa y nos dijo algo así como que la antena no es tan perjudicial como dicen. Nosotros sabemos de casos que han provocado enfermedades, dolores de cabeza e incluso ataques de ansiedad. No queremos tener eso tan cerca de los niños, encima de nuestra cabezas», asegura el portavoz.
Los vecinos siguen con sus reivindicaciones y ayer a las 20.00 horas se manifestaron arropados con muchas personas de otros barrios de Puente Tocinos. «Puesto que no tienen permiso, queremos que retiren la antena. ¿Aquí ha quién creemos? Hace más de un mes que eso tenía que estar fuera de la azotea. Vamos a intentar todo lo que esté en nuestras manos. Seguiremos con nuestras guardias, y en última instancia, iremos a juicio», asevera sin tapujos Simón.
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